miércoles, 25 de marzo de 2020

CORONAVIRUS Y APOCALIPSIS



Por Daniel Ambrosini
Santo Tomás según Leonardo Castellani – Revista Fe y Razón 
En todas las épocas hubo plagas de diverso tipo y, hombres insignes y no tanto, han visto en ellas signos del Apocalipsis. Sin embargo, todas esas plagas pasaron y el mundo siguió rodando. Pero ¡ojo! - dice el P. Castellani - alguna vez el Apocalipsis va a suceder y no será dentro de miles de años, como pronostican (y tal vez desean) muchos. “Vengo pronto” dijo Jesús y, si bien para Dios mil años son como un día, no resulta creíble que el Apocalipsis sea dentro de miles o millones de años (muerte térmica del universo, que dirían los científicos).


Relacionado con el tema del coronavirus hay una teoría conspirativa que me fuera enviada por un amigo, que resumidamente dice así:

I. Se abre el telón: China se enferma, entra en "crisis" y paraliza su comercio. Se cierra el telón.
II. Se abre el telón: Se devalúa la moneda china. No hacen nada. Se cierra el telón.
III. Se abre el telón: Por falta de comercio de empresas de Europa y EEUU que están basadas en China sus acciones caen 40% de su valor.
IV. Se abre el telón: El mundo enferma, China compra 30% de las acciones de empresas de Europa y EEUU a un precio bajísimo. Se cierra el telón.
V. Se abre el telón: China tiene controlada la enfermedad y es dueño de las empresas de Europa y EEUU. Y decide que estas empresas se quedan en China y gana USD 20,000 Billones. Se cierra el telón. ¿Cómo se llama la obra?
VI: Jaque Mate!

Nunca me han gustado las teorías conspirativas porque la mayoría de las veces son fantasía pura, sin embargo me llamó la atención recibir la misma teoría (con otras palabras) de otra persona que respeto mucho. O sea que China habría propagado el virus intencionalmente para tener ventajas económicas inconmensurables y dominar las empresas de Occidente, todo como parte de la “guerra comercial” que todos conocemos.

No tengo la menor idea qué sustento podrá tener esta teoría, pero me puse a releer el Apocalipsis, a la luz del P. Castellani, y me sorprendió mucho lo siguiente:
En el relato de las siete copas (Castellani las llama Redomas, que según el diccionario significa: Vasija de vidrio ancha en su fondo que va estrechándose hacia la boca) dice el P. Castellani:
     “Destas siete misteriosas y desconcertantes Redomas, excepto la Primera y la Sexta, no encuentro apoyo en los Santos Padres para entender las “Plagas”, o castigos de los últimos tiempos. Lo cual se explica, ellos estaban demasiado lejos de su realización” (L. Castellani, El Apocalipsis de San Juan, pag. 217).
O sea que estas copas o redomas son plagas que azotarán a los pueblos. El P. Castellani va interpretando, a la luz de los Santos Padres (primera y sexta) y de otros autores cada una de estas copas. Pero vamos directamente a la sexta copa: Apocalipsis XVI, 12

“El sexto derramó su copa sobre el gran río Eufrates, y secóse su agua, para que estuviese expedito el camino a los reyes de oriente”. (Traducción del P. Straubinger)

“Y el Sexto Ángel volcó su Redoma
Sobre el gran Río Éufrates
Y secó su agua –
Para abrir el camino
A los reyes del Sol Naciente” (Traducción del P. Castellani)

El P. Castellani interpreta el río Éufrates como la barrera entre Occidente y Oriente, o sea entre la Civilización y la Barbarie. Esta barrera era literal y física en la época del imperio romano y se hizo metafórica en los últimos siglos. “Esta Frasca Sexta pues allana el camino al Oriente en armas contra el Occidente”.
El P. Castellani dice “en armas”, pero bien las mismas pueden ser económicas e interpreta a Rusia como el peligro de oriente. Sin embargo, el texto (…sol naciente…) encaja mejor con China/Japón que con Rusia.
Por otra parte, en su libro “Le Sens Mystique de l'Apocalypse” el P. de Monleon interpreta al Éufrates como “fertilidad o abundancia material”, la sexta copa-plaga seca la abundancia y abre el camino a los Reyes de Oriente, o del Sol Naciente. Esta otra interpretación es complementaria con la anterior y encaja perfectamente con los hechos actuales: La sequía del Éufrates como un crack económico mundial y un default generalizado (que podría ocurrir, veremos), producto de una plaga.
Esto prepararía excelentemente la venida del Anticristo que sería el que solucione estos problemas económicos

Finalmente, como bien dice el P. Castellani, el Apocalipsis no es un libro de terror sino de esperanza y resultaría muy esperanzador estar viviendo la sexta copa, porque ya se viene la séptima…. y Cristo!

Dejo a mejores mentes y más formados intelectos la mejor interpretación de estos hechos y de la Profecía.

Maranatá!